Perú: Pedro Castillo y Keiko Fujimori pasan a la segunda vuelta

La segunda vuelta se dará el 6 de junio. Uno de los dos gobernará el Perú sin mayoría parlamentaria y con un Congreso fragmentado.
Fuente de la imagen: EFE
La primera vuelta de las Elecciones Generales de Perú han tenido un desenlace familiar en la historia política de los últimos años en el país: una segunda vuelta polarizada, en medio de una crisis de representación que se manifiesta en el bajo caudal electoral de todas las opciones políticas, incluidas las dos ganadoras, y un Congreso que nuevamente estará fragmentado entre 9 y 11 bancadas y sin mayoría.
Al 96.18% de actas contabilizadas por la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) se confirma el escenario que dio el conteo rápido de Ipsos al 100%, emitido por América TV al cierre del domingo: el ballotage del 6 de junio será disputado por el maestro y líder sindical de izquierda, Pedro Castillo, por el partido Perú Libre, quien obtiene el 15,7% de votos emitidos; y por la ex congresista de derecha Keiko Fujimori, por el partido Fuerza Popular, quien logra un respaldo del 11%.
EL SORPRENDENTE CRECIMIENTO DE PEDRO CASTILLO EN LAS ENCUESTAS
El crecimiento de Castillo en las encuestas de las últimas semanas fue significativo. Así, el candidato de Perú Libre pasó de 6,5% de votos emitidos en el simulacro de votación de El Comercio-Ipsos del 31 de marzo a 12.8% en el simulacro compartido de manera confidencial por esta encuestadora el 10 abril, la noche previa a la elección.
Castillo ganó terreno frente a la caída del candidato de Acción Popular, Yonhy Lescano (líder de la competencia por algunas semanas) y el estancamiento de la líder de izquierda progresista Verónika Mendoza, de Juntos por el Perú, cuya intención de voto fluctuó permanentemente alrededor del 8% obtenido en las urnas.
El vertiginoso ascenso de Castillo ha recogido un voto de protesta que en elecciones anteriores fue representado por opciones de izquierda como la propia Mendoza (2016) y por el expresidente Ollanta Humala (2011 y 2006).
A diferencia del resto de candidatos, Castillo lideró una campaña poco marcada por las restricciones por el COVID-19, con mítines y recorridos en diferentes zonas del país. Incluso, el analista político Gonzalo Banda encuentra un punto de inflexión en la campaña del candidato cuando éste fue detenido a inicios de marzo en Mazuco, Madre de Dios por incumplir el distanciamiento social.
Castillo ha ganado en 16 de 26 circunscripciones electorales, con votaciones contundentes en las zonas de mayor pobreza del país, así como en aquellas donde se han dado conflictos sociales alrededor de proyectos mineros.
Sin embargo, no debe exagerarse el tamaño del apoyo actual a Castillo a partir de su rápido ascenso. En cualquiera de las tres elecciones presidenciales anteriores, el porcentaje de votos obtenido por Castillo lo habría colocado solamente en tercer o cuarto lugar. Su pase a segunda vuelta debe tanto a su apoyo como a la atomización terminal del escenario político en este proceso.
LA PROPUESTA DE CASTILLO
Castillo saltó a la fama nacional como líder de una de las huelgas magisteriales más largas de la historia en el 2017, hecho que gatilló la caída del primer gabinete del entonces presidente Pedro Pablo Kuczynski. Paradójicamente, en ese momento Castillo mostró cercanía política con parlamentarios del fujimorismo, hoy su rival electoral.
Durante la huelga, las autoridades del sector Interior acusaron repetidamente a Castillo y su facción sindical de cercanía al Movadef, considerado el brazo político del movimiento terrorista Sendero Luminoso. Un punto importante a destacar es que su socio político en esta elección ha sido Vladimir Cerrón, líder de Perú Libre y ex gobernador de Junín, que fue sentenciado en 2018 por el delito contra la administración pública en la modalidad de negociación incompatible o aprovechamiento del cargo. Algunos puntos que resaltan del plan de gobierno de Castillo son los siguientes:
- Convocar a un referéndum para elegir una Asamblea Nacional Constituyente, integrada por organizaciones populares,
representantes de trabajadores y partidos políticos. Este grupo estará a cargo de redactar una nueva Constitución. - Implementar un nuevo modelo económico denominado “Economía popular con mercados” que propone que el Estado asuma el rol de empresario “para competir equitativamente” con el sector privado.
- La nacionalización de todos los sectores estratégicos tales como el minero, gasífero, petrolero, hidroenergético y de
comunicaciones. - Fortalecer el Sistema Nacional de Pensiones y eliminar paulatinamente el Sistema Privado de Pensiones.
KEIKO EN LA SEGUNDA VUELTA
Keiko Fujimori consigue por tercera vez pasar a la segunda vuelta electoral. Lo logra en el momento político aparentemente más improbable: la líder de Fuerza Popular aún está inmersa en procesos de investigación por lavado de activos que la llevaron dos veces a prisión preventiva desde el 2018.
Así, el 11% de votos con el que hoy cuenta es poco menos de la tercera parte de lo que alcanzó para pasar a segunda vuelta en las
elecciones del 2016 y se acerca más al tradicional “voto duro” con el que ha contado el fujimorismo en este siglo.
Fujimori ha aprovechado en esta elección la fragmentación del voto de derecha y centro-derecha en varias opciones, con diferentes matices económicos, sociales y de valores. En particular, destacaron en la primera vuelta las candidaturas de Rafael López Aliaga, de derecha conservadora (9,62%), y de Hernando de Soto (9,58%), de derecha tecnocrática, quienes aún se disputan voto a voto el tercer lugar a nivel nacional y el liderazgo en Lima Metropolitano, la circunscripción con mayor población en el país.
Sumadas, las opciones de derecha y centro-derecha podrían superar el 40% de los votos emitidos, lo cual pondría a Fujimori en una situación ventajosa de partida en la segunda vuelta. Sin embargo, no queda claro si habrá un endoso de Renovación Popular a Fuerza Popular, toda vez que, en declaraciones posteriores a la elección, el candidato López Aliaga se refirió con simpatía a las coincidencias que mantiene en temas de valores “pro-familia”con Pedro Castillo.
Asimismo, será relevante cualquier variación en el voto blanco/viciado (17,5%) y el ausentismo (28,3%).
RESCATE 2021, LA PROPUESTA DE FUERZA POPULAR
El plan de gobierno de Fuerza Popular, denominado “Rescate 2021: Plan de Rescate y Reconstrucción Nacional”, tiene cuatro pilares fundamentales en lo económico: generar empleo y promover su desarrollo, reactivar la economía, restaurar el equilibrio de las cuentas fiscales, y promover la seguridad ciudadana.
Además, el plan propone:
- Mejorar el nivel de atención de pacientes e implementar una red interconectada de centros de atención primaria
- Revisar la Ley de Reorganización del Sistema Nacional de Aseguramiento de Calidad Educativa para Educación Superior
- Construir nuevos penales para disminuir el hacinamiento y la sobrepoblación. Diferenciar establecimientos de acuerdo con
sus características
EL NUEVO CONGRESO
Quedan 8 semanas de campaña de segunda vuelta, donde cualquier favoritismo inicial puede revertirse, como ha ocurrido antes en el Perú y acaba de darse en la elección del vecino Ecuador. Sin embargo, el 11 de abril deja una certeza: quien salga elegido contará con escaso respaldo popular y no tendrá mayoría en el Congreso.
¿Cómo se conformará, entonces, el nuevo parlamento? El conteo de actas de la elección legislativa va más lento, con 74% de actas contabilizadas, pero ya arroja algunas luces. Del conteo de votos que hasta el momento ha desarrollado la ONPE, 9 agrupaciones políticas habrían pasado la valla electoral y serán parte del Congreso, mientras otras dos aún no tienen confirmada su participación. Esto ya abre un escenario de gran fragmentación, a lo que se suma el hecho de que ningún partido tendrá mayoría. Perú Libre contaría con la minoría mayoritaria más amplia (Ipsos proyectaba ayer 32 curules) seguido por Fuerza Popular (24) y Acción Popular (21).
Esta fragmentación podría complicar las intenciones de realizar cambios constitucionales. No obstante, la experiencia del Congreso complementario 2020-2021 evidencia que esta atomización no es obstáculo para amplios consensos en medidas populistas y que vulneran el equilibrio fiscal. Así, los riesgos regulatorios a la actividad empresarial seguirán vigentes.
